Anne Stahel es suiza y estuvo recientemente en la Facultad de Ingeniería en Oro Verde, durante tres meses, como parte del programa de intercambio IAESTE (International Association for the Exchange of Students for Technichal Experience). Realizó prácticas en el Centro de Ingeniería de Rehabilitación e Investigación Neuromuscular y Sensorial (CIRINS) e hizo el curso de Metodología de la Investigación Científica. “Lo pasé muy bien en Argentina y volvería siempre que tuviera la oportunidad”, sintetizó su experiencia.

Anne tiene 25 años y nació en Suiza. “Crecí en un pequeño pueblo en el campo cerca de Alemania y ahora debido a mis estudios vivo cerca de la capital, Zúrich, desde hace cinco años”, contó. En esa ciudad estudia Ciencias de la Salud y Tecnología en la ETH (Escuela Politécnica Federal, en castellano) de Zúrich. La describió como “una carrera relativamente nueva, centrada sobre todo en tecnología médica. Por ejemplo, en comparación con la Bioingeniería, tenemos menos asignaturas puramente técnicas y más interdisciplinarias o sobre la fisiología del cuerpo”.

La experiencia académica

Sobre su inclinación por esta formación, Anne reconoció: “Me gusta la interfaz entre medicina y tecnología. Siempre me ha interesado mucho el cuerpo humano y me parece muy emocionante conocer nuevas técnicas que pueden utilizarse para ayudar al cuerpo en enfermedades, por ejemplo. Además, el programa de estudios es muy variado y ofrece algo especialmente interesante para todos”.

Sobre su experiencia de intercambio y la opción por nuestra Facultad y Universidad, la estudiante europea explicó: “Como siempre me había gustado el español y quería profundizar mis conocimientos, por supuesto que la Universidad de Entre Ríos me interesó especialmente. Las prácticas podían integrarse particularmente bien en mis estudios y la duración se ajustaba a mis deseos. Afortunadamente me decidí por ella”.

En la FIUNER Anne hizo prácticas en el Centro de Ingeniería de Rehabilitación y realizó el curso de Metodología de la Investigación Científica. “Durante las prácticas, planificamos un estudio con pacientes de fibromialgia y me pareció especialmente emocionante aprender sobre esta enfermedad y conocer métodos que podrían ayudar al diagnóstico. El equipo me apoyó mucho y me enseñó muchas cosas interesantes”, valoró.

También destacó que el curso de Metodología “fue emocionante. Ahora puedo aplicar sus contenidos a la estructura de mi tesis de máster y a su presentación”.

La experiencia de vida

La estadía de Anne en Oro Verde duró tres meses y s emostró muy agradecida con las personas que la recibieron y acompañaron. “Durante ese tiempo, viví con Ivana, que estudia Bioinformática. Junto a sus amigas cenábamos de vez en cuando, me invitaban a su fiesta de cumpleaños y me enseñaron lo que es una peña. Mis vecinos también me dieron una bienvenida especialmente calurosa y me invitaban a cenar”, apreció.

Además de cursar y estudiar, la joven suiza disfrutó de otras actividades en Oro Verde. “Fui al gimnasio y a clases de Spinning y BodyPump. Allí conocí a una de mis mejores amigas en Oro Verde, Nair. Con ella salíamos a tomar un helado, merendar o a pasear. También fui a clases de Pakua, Acrobacia, Artes Marciales y una vez incluso de Arquería. Aprendí mucho en todas y fue muy divertido”, reconoció.

También aprovechaba los fines de largos para conocer –“explorar”– otros lugares de Argentina. Por ejemplo, las Cataratas de Iguazú, como la retrata la foto que ilustra esta nota. “En general, estoy abrumada por la belleza del paisaje de Argentina y la hospitalidad y apertura de los argentinos”, elogió Anne.

Consultada sobre similitudes y qué diferencias entre la experiencia de estudiar en Argentina y en Suiza, consideró: “En Suiza estudio en una universidad muy grande y todo es mucho más anónimo. Apenas hablas con los profesores y la relación es muy jerárquica. En general, en Suiza se valora mucho la ética del trabajo y el éxito, por lo que la gente tiende a estar estresada”.

En cambio, señaló, “en Argentina todo era mucho más relajado. La gente pone más énfasis en la interacción social y en divertirse. Como resultado, a pesar de las difíciles condiciones económicas, suelen ser más felices que muchos suizos. Sin embargo, también significa que todo lleva más tiempo y funciona de forma menos fiable. Lo que ahora aprecio mucho en Suiza de nuevo”.

Finalmente, concluyó: “Lo pasé muy bien en Argentina y volvería siempre que tuviera la oportunidad. La calidez y franqueza de los argentinos es única y siempre tendré buenos recuerdos de mi estancia en Oro Verde”.

("La ETH es muy diferente de la UNER. Hice la foto del campus y la envié a mis amigos de la ETH. Las ovejas hacen que el campus sea especialmente simpático", confesó Anne)