La edición 2020 de la Acción de Extensión se realiza en la ciudad de Crespo, en modalidad virtual, y tuvo su presentación el viernes 25. Unos 30 niños y niñas hablaron y dibujaron sus ideas sobre ciencia y tecnología. Participarán de encuentros virtuales en los que compartirán experimentos y juegos con docentes, graduados y estudiantes de la FIUNER.
La Acción de Extensión “Pequeños Científicos desde casa” de la Facultad de Ingeniería tuvo su jornada de presentación este viernes 25 de septiembre. La iniciativa que se realizó en los últimos 10 años en la ciudad de Oro Verde se trasladó en esta ocasión a Crespo, a pedido de su Municipio, y se lleva a cabo en modalidad virtual, ante el contexto de emergencia sanitaria.
Durante la Acción, que tiene planificadas actividades hasta mediados de diciembre, se diseñarán e implementarán materiales audiovisuales y actividades que permitan a niños y niñas de Crespo realizar experiencias vinculadas con saberes de ciencia y tecnología en el espacio de su casa, con materiales que formen parte de su vida cotidiana, guiados con las herramientas desarrolladas por el equipo de la FIUNER.
Para participar de las actividades la Municipalidad crespense abrió una inscripción que demostró el interés de la comunidad por la acción de extensión de la Facultad. En pocos días se completó el cupo de 30 niños y niñas participantes, de entre 9 y 11 años, y se conformó una lista de espera de 18 más.
La jornada de presentación y los seis encuentros restantes –cinco de “experimentos” y el de cierre- se realizan a través de la plataforma educativa del Municipio, donde los viernes cada 15 días se encuentran los niños y niñas, sus padres y madres, y el equipo de la FIUNER. Durante la semana que no hay taller, se suben a la plataforma materiales, videos y pistas referidos al experimento de la semana siguiente.
Acercar la niñez a la ciencia y la ciencia a la niñez
La directora de la Acción de Extensión, la profesora Jesuana Aizcorbe, informó que el viernes se hizo la primera actividad. “Como todos los años, charlamos sobre qué es la ciencia, la tecnología, qué hace una persona que trabaja en esto. Está bueno para que salgan las ideas de los niños o la sociedad. Aparecen la Química, el Espacio, la Arqueología; uno de los chicos dijo que los científicos hacen vacunas, varios dibujaron el Covid, y uno nos preguntó para cuándo la máquina del tiempo”, contó entre risas.
Respecto de los experimentos que ocuparán los cinco encuentros siguientes, la docente explicó que “la idea es que ellos hagan experimentos seguros, sin manejo de cosas que no están acostumbrados a manejar ni que puedan correr un riesgo si no están con supervisión. De todas formas, pensamos actividades de bajo nivel de supervisión para no recargar a las madres y los padres”.
Aizcorbe, que había participado de las primeras ediciones de Pequeños Científicos, destacó que “una diferencia respecto de años atrás es que dibujan muchas más científicas mujeres que antes. También dibujan la imagen del 'científico loco', tipo (Albert) Einstein. Pero cuando cerrás el taller esa imagen cambia, porque ellos también se sienten involucrados y más cercanos a la ciencia”.
La directora valoró la amplitud de la convocatoria y la participación. “No participa un estereotipo de niño o niña, por ejemplo que le gusta la ciencia. Participan todos, con diversos intereses. Un par contaron que les gusta investigar y la ciencia, pero otros nos cuentan que les gusta el Minecraft, jugar a la pelota o bailar. Es un espacio donde todos esos intereses pueden confluir”.
En relación al aprendizaje que habilita Pequeños Científicos, Aizcorbe indicó que “es algo lúdico, un acercamiento a la ciencia desde el juego. Para nosotros es más importante que ellos hagan el experimento a que les quede la explicación formal. Damos esas explicaciones. Pero aunque no les queda lo formal, sí les queda la idea”. Y enfatiza el mensaje que deja el taller: “lo importante en la ciencia no es responder, sino más bien preguntar”.
Ciencia y democracia
Uno de los conceptos que postula la Acción de Extensión es la “democratización de la Ciencia y la Tecnología”. Consultada sobre ello, la docente consideró que se busca “poner en tensión la idea de que están los expertos, los que pueden opinar, las voces autorizadas, y después todo el resto de la gente que no entiende nada y tiene que hacer lo que el experto dice”.
“Al hacer ciencia es tan importante lo que hacés como lo que comunicás. Obviamente que para hacer un desarrollo científico o tecnológico tenés que estudiar, dedicarle una cantidad de tiempo. Pero si no podés explicarle lo que estás haciendo a cualquier persona, es un problema. Pensamos que estas son maneras, estrategias, a mediano plazo, para que los chicos que el día de mañana van a ser adultos, sepan que también pueden involucrarse”, agrega la profesora.
El equipo de Pequeños Científicos está integrado, además de Aizcorbe, por la docente Celina Bratovich; los y las estudiantes Andrés Cabas, Nazareth Grosso, Melina Pilz, Irupé Bressan, Axel Julián Pascal y Fabricio Franco Zárate; y los graduados Mauricio y Tanus Mafud Juan Beret.