MicrobiAr es un proyecto de investigación que integra a más de 80 profesionales de diversas disciplinas para estudiar el comportamiento de los microbios del tracto digestivo en personas con obesidad, prediabetes y diabetes tipo 2. Busca ampliar los conocimientos científicos en la materia detrás del objetivo de prevenir, controlar y, en los casos en los que sea posible, lograr la remisión de la diabetes tipo 2. El Licenciado en Bioinformática por la Facultad de Ingeniería de la UNER, Juan Pablo Bustamante, es uno de sus dos investigadores principales.
Bustamante es docente de las cátedras de “Modelado y Simulación de Macromoléculas” y de “Diseño y Descubrimiento de Drogas” en la FIUNER, investigador del Instituto de Investigación y Desarrollo en Bioingeniería y Bioinformática Conicet-UNER y director académico de Ingeniería Biomédica en la Facultad de Ingeniería de la Universidad Austral, donde también tiene un cargo de profesor y de investigador. Junto con Gustavo Frechtel, investigador Clínico del Conicet y jefe de Nutrición del Hospital de Clínicas de Buenos Aires, lideran un equipo de más de 80 profesionales que conforman MicrobiAr.
El estudio busca conocer cómo se comportan los microbios que habitan en el tracto digestivo (microbiota intestinal) de personas con obesidad, prediabetes y diabetes tipo 2, al alimentarse con dietas basadas en recomendaciones de la Asociación Americana de Diabetes con hincapié en alimentos de origen vegetal e integral. Lo hará a través de diferentes análisis de laboratorio, muestras de materia fecal, registro alimentario, actividad física y otros datos relevantes de los pacientes-consultantes, que serán acompañados con capacitaciones y seguimiento personalizado de forma gratuita.
Por la FIUNER también participan el Dr. José Biurrun Manrresa, investigador del IBB Conicet-UNER, quien lidera el trabajo de Bioestadística de MicrobiAr; el Lic. en Bioinformática del grupo de investigación de Análisis de Microbiota y Microbioma Humano, Rodrigo Peralta, que trabaja en el procesamiento y análisis bioinformático de microbiota y microbioma; y los estudiantes avanzados de Bioinformática, Mauro Ibáñez y Gastón Luna Páez.
El equipo completo de MicrobiAr está compuesto además por profesionales provenientes y especializados en diversos campos. El estudio es una clara muestra de la potencialidad que tiene la Bioinformática para aportar a un trabajo multidisciplinario a gran escala. Al respecto, Bustamante destacó: “una de las cosas que más me ayudó de la formación en la FIUNER es darme las bases y el potencial para un trabajo interdisciplinario entre muchos profesionales de distintas áreas, pero complementarias. Somos más de 80 médicos/as, nutricionistas, ingenieros en sistemas, estudiantes de ing. biomédica, licenciados en Bioinformática, biotecnólogos/as, biólogas/os moleculares, comunicadores y especialistas en marketing y diseño, entre otros”, enumeró.
La Bioinformática y la interdisciplina
El investigador principal de Microbiar insistió: “El trabajo interdisciplinario es clave, sobre todo para abordar proyectos de esta envergadura y que van a incluir mucha gente. Después uno tiene que especializarse y trabajar con equipos para perfeccionarse, pero la base la brinda la formación de la Facultad”.
Como ejemplos de la labor de los profesionales de MicrobiAr, el egresado, docente e investigador de la UNER mencionó: “análisis clínicos, seguimiento personalizado con médicos/as y nutricionistas, mediciones antropométrica muy relacionada a microbiota y microbioma, biomarcadores y distintos parámetros”.
Respecto de los avances de la Bioinformática en el diálogo y trabajo en común con otras disciplinas, Bustamante consideró: “hay mucho por avanzar y un camino por delante, que estamos armando, pero a medida que lo transitamos nos damos cuenta de que tiene un potencial extremadamente alto”.
(Parte del equipo trabajando en el procesamiento de muestras de prueba de origen de materia fecal para análisis de microbiota y microbioma)
Único en el mundo
El investigador de la UNER afirmó que “no hay ningún proyecto como Microbiar a nivel mundial” dadas sus particularidades. “Hay estudios que tienen más pacientes que el nuestro, pero MicrobiAr engloba tantas áreas diversas y complementarias que es único en sus características”, ratificó.
Actualmente, el estudio está en una fase de difusión de la primera etapa: la preselección de pacientes. Hacia adelante, Bustamante advirtió: “uno de los desafíos más grandes del proyecto, más allá de la parte técnica y científica de vanguardia, es la adherencia de la gente”. E ilustró que en Argentina el porcentaje de personas que abandonan los ensayos clínicos ronda el 30 o 40 por ciento. “Para minimizar eso vamos a hacer un seguimiento muy cercano de cada paciente y ya estamos trabajando con cada una de las personas que ingresarán en el estudio”, aclaró.
El seguimiento de las personas que participarán del estudio contempla planes de alimentación y actividad física supervisados en forma constante, mediante encuentros presenciales en el Hospital de Clínicas de Buenos Aires, como de llamados telefónicos, reuniones virtuales, talleres y otras actividades.
El estudio MicrobiAr se compone de seis etapas:
1. Pre-selección de personas. Personas entre 30 y 60 años con obesidad, pre-diabetes o diabetes tipo 2, que residan en Buenos Aires, debido a que se requerirá asistir con frecuencia al Hospital de Clínicas. También buscan personas de entre 30 y 60 años que no tengan ninguno de estos desórdenes metabólicos para sumarse como grupo control de referencia.
2. Reclutamiento clínico de personas y firma de consentimiento informado.
3. Inicio de consultas presenciales en el Hospital de Clínicas.
4. Registro alimentario de última semana.
5. Toma de muestras de sangre y de materia fecal.
6. Seguimiento durante 2 años (de personas con obesidad, pre-diabetes o diabetes tipo 2).
¿Es posible prevenir, controlar e incluso lograr la remisión de la diabetes tipo 2?
Respecto de uno de los objetivos superiores de MicrobiAr, Bustamante aseguró que “a nivel mundial se sabe que en algunos casos se puede lograr la remisión de la diabetes tipo 2. Queremos ayudar a mejorar la calidad de vida de la gente y en los casos que sea factible, ayudarlos a alcanzar dicha remisión”. Además, mencionó que el estudio, “como nuestro grano de arena”, se propone “medirla y publicarlo en revistas internacionales para contribuir a mejorar la investigación, la ciencia y la medicina a nivel mundial”.
(Parte del equipo de nutricionistas y médicas trabajando en la semana de la obesidad en el Hospital de Clínicas)
El proyecto es financiado por Conicet, la Universidad Austral y -a través de donaciones- por las empresas Zymo Research e Illumina, de Estados Unidos.
Para más información, ingresar en https://microbiar.com o comunicarse a: Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.